Mientras camino por esta línea,
ya me dirijo hacia otro lado.
Es por ti que mi corazón vivirá,
pues tú nunca vas a morir.
Si quieres conocerme, yo soy guerra.
Que venga la pintura.
Nada que me digas podrá separarme de mi hombre.
Nada que hagas, pues estoy muy unida a mi hombre.
Estoy pegada a él como una estampilla a una carta;
como las plumas de un ave, somos inseparables.
Te lo digo desde el principio: no me separaré de él.
Nada que me compres hará que le diga una mentira.
Nada que hagas podrá hacer que le sea infiel.
Le di mi palabra que sería sincera, y eso haré.
Mejor créelo, no voy a decepcionarlo.
Yo opino que él es lo máximo.
Yo digo que es la crema de la crema.
Como una cuestión de gusto, para ser exacta,
es un hecho que él es mi amado.
Ningún hombre musculoso me hará dejarlo.
Si ella se quiere ir...
Si él se quiere ir...
Somos aves de una sola pluma.
miércoles, 21 de septiembre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario