Intenté dejarte, no lo niego;
mil veces por lo menos
cerré el libro de lo nuestro.
Pero cada mañana despierto
nuevamente a tu lado.
Los años pasaron,
se llevaron tu orgullo;
el bebé está llorando
y ya no sales a ningún lado:
todo tu trabajo
está enfrente tuyo.
Amor mío, buenas noches,
espero estés satisfecha;
la cama es un poco estrecha,
pero mis brazos se abren para ti.
Aquí tienes a un hombre
que aún se esfuerza
por hacerte sonreír.
jueves, 21 de agosto de 2014
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