igual que un cuerpo sobre el río, en un carro.
Y el único sonido que podía escuchar
era un grillo moribundo dentro de un tarro.
Por debajo de la puerta, vi pequeños rayos
de luz que entraban a mi cuarto,
se arrastraban bajo mis sábanas
y salían de cada uno de mis poros.
Cuando pienso en ti,
flores crecen hacia fuera de mi tumba.
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