Invocaciones psicodélicas
de Mata Hari en la estación,
a ti te entrego.
Una princesa de Java de nacimiento hindú,
una mujer de carne, un hijo de tierra,
a ti te entrego.
Los Jardines Colgantes de Babilonia,
Miles Davis, el Unicornio Negro,
a ti te entrego.
Los palacios de Moctezuma
y los jardines de la tumba de Akbar,
a ti te entrego.
La Diosa Araña y el Chico Aguja,
y los esclavos enanos que ellos emplean,
a ti te entrego.
Un súper-sueño en colores crema
de Ali McGraw y Steve McQueen,
a ti te entrego...
Vamos nena, salgamos del frío,
y dame, dame, dame tu precioso amor,
para que yo lo sostenga.
La epopeya del Gilgamesh,
un lindo vestido de una sola línea,
a ti te entrego.
La médula espinal de JFK
envuelta en el negligé de Marylin Monroe,
a ti te entrego.
Y no quiero nada a cambio,
únicamente la palabra más suave y sin aliento
pido de ti.
Una palabra contenida en un grano de arena
que apenas puede andar, que ni siquiera se levante,
es todo lo que pido...
Vamos nena, sal del frío,
y dame, dame, dame tu precioso amor,
para que yo lo sostenga.
Vamos, entrégamelo.
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