El sonido de tu voz
levanta gatos de sus tumbas.
El golpeteo de tus pasos
despierta cuevas de murciélagos.
Bebés en el sol, bebés en el sol.
Tu primera respiración quemante
fue una sinfonía,
y un barco lleno de caballos
se hundió en el mar.
Bebés en el sol, bebés en el sol.
miércoles, 11 de diciembre de 2013
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