Con un truco de manos
nos adentramos
en un limpio lago,
donde sólo libélulas
vuelan a nuestro lado.
Nadie resultó lastimado;
nunca te has equivocado.
Desliza tu mano y adéntrate:
el agua es clara e inocente
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Como decía Schopenhauer, luego Nietzsche, solo con nuestra voluntad podemos ir más allá de la representación subjetiva de la realidad y acceder a otros lugares de conciencia y percepción. En la linea, más poética y menos mito-simbólica, de Pyramid Song, Radiohead nos dejan una nueva alegoría que nos anima, nos invita, a cuestionar(nos) y romper(nos) con una realidad subjetiva rancia y opresiva.
El truco de manos (Jodorowskiano) es la voluntad creativa, y el lago el espacio de liberación interna, donde el poder y la (re)creación son posibles. Los dragones, símbolos arquetípicos del poder y la sabiduría, de la lucha final cuya resolución da lugar a un nuevo orden, se encuentran en este lugar pre-fundacional, listos para ser enfrentados o quizás para revelar sus secretos.
Aunque traspasar esa línea de lo aparente e ir al encuentro de lo esencial es uno de los actos mas aterradores para el hombre, la letra dice: "Nadie resultó lastimado porqué el miedo forma parte de lo aparente y "nunca te has equivocado" porque la intuición es el instrumento sagrado para realizar el salto.
El agua clara e inocente del lago, elemento creador de la vida, representa el espacio de gestación de una conciencia a la que Thom Yorke y compañía vienen apelando desde hace unos años.
Grandísima "traición", Emmanuel, un saludo desde Barcelona, España.
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