de Nueva York por las tuberías con aire acondicionado.
El repiqueteo de pesados trenes negros;
un millón de motores en punto muerto;
el tic-tac de una bomba de tiempo
a quince metros en lo profundo del concreto;
"una pequeña gotera que se convierte en lago",
dice una vocecita en mi auricular.
Así que me entrego al ritmo, al tic-tic-tac,
estoy demasiado jodido para pelear...
y el tic-tac sigue moviendo el péndulo
en el viejo reloj del abuelo.
Puedo verte, pero nunca puedo alcanzarte.
Y llovió toda la noche y luego todo el día,
gotas del tamaño de tus manos y tu cara;
los gusanos se asomaron a ver qué pasaba,
mientras sacábamos los coches del río.
Es inexorable,
invisible,
infatigable,
indiscutible,
innegable...
¿Por qué entonces luce tan bello?
¿Cómo es que la luna cae del cielo?
Puedo verte, pero nunca puedo alcanzarte.
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