y por ti, por todo lo que has hecho,
he tenido ganas de gritar.
Tú eras la dueña del mundo,
todo se trataba sobre ti;
pero yo me arriesgué a llamarte mía
aunque en verdad no te conocía.
Creía que podías amar... qué tonto fui.
Y la vida continuó,
seguí cantando mis canciones,
pero en ti había algo de locura.
Malinterpreté que te gustara mi canción;
¿por qué no pude haberte tenido?
Fue un sueño loco y me hiciste mal,
me dejaste olvidado e inseguro.
Dijiste que el amor estaba muerto,
pero en mi cerebro yo no quise creerlo.
En el teléfono me dijiste
que en verdad nunca me conociste.
Creía que eso era amor... qué tonto fui.
Y todo ocurrió
como en un juego de "encantados",
como si fuera una película antigua.
Tú no entendiste, no me comprendiste,
supongo que ya no tiene importancia:
cada sueño se hizo pesadilla,
y nada en verdad importaba.
Creía que era amado... qué tonto fui.
He soñado contigo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario