todos los cadáveres que dejaste regados.
Estuvimos hablando la última hora;
he dejado de intentarlo, y es un gran alivio,
voy a quedarme siempre abajo
sin nadie que me cause penas ni me joda,
y renovarme simplemente.
Tu opinión siempre fue la ley del pueblo,
lo único que yo siempre pude entender.
Fui viviendo hora tras hora,
lo único que nunca cambió.
Pero corriste encima de mí
y me arrastraste al final del día.
No permanezcas en contacto,
renuévate simplemente.
He estado pensando
en todas las cosas que me he perdido,
las situaciones que dejé pasar
por este amor unidireccional
que yo tomé por mutuo;
he dejado de intentarlo, y es un gran alivio,
voy a quedarme siempre abajo;
nunca fui un buen ladrón,
más bien resulté un payaso...
Debo renovarlo.
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