He contemplado el suicidio,
pero realmente no es mi estilo.
Así que actuaré aburrido
para contener la sangre
que debí haber vertido.
Ella siempre logra angustiarme,
mi corazón se arrodilla ante ella.
Pero pongo una cara de póquer tan buena
que no se daría cuenta ni mi madre.
Pero mi nena
tiene demasiada vanidad,
es casi como un espejo.
El sonido de su nombre
envía un permanente temblor
por mi espina dorsal.
Guardo su fotografía
junto a mi corazón,
porque en mi vida
ella juega un papel protagonista.
Todo es alcohol y cigarros.
No hay lugar para lamentos baratos.
Ella siempre logra angustiarme,
mi corazón se arrodilla ante ella.
Pero pongo una cara de póquer tan buena
que no se daría cuenta ni mi madre.
Pero mi nena
tiene demasiada vanidad,
es casi como un espejo.
El sonido de su nombre
envía un permanente temblor
por mi espina dorsal.
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