Teléfono descolgado:
nadie sabe dónde estamos.
Llevo ya un buen rato
que no bebo champaña.
El océano es azul como tus ojos.
Voy a llevarlos conmigo cuando me vaya.
Hace mucho desapareció ese tiempo
cuando vivíamos en Coney Island.
No hay una sólo cosa buena
que al final no muera.
Voy a llevarlas conmigo cuando me vaya.
A lo lejos pasa un tren silbando.
De cualquier lugar al que fuiste
a cualquier lugar en el que has estado:
al final del día sólo te despides.
Estás por encima y lejos de todo.
Todo fue para ti, todo te ha pertenecido.
Esa vez que nos quedamos dormidos
en el porche de Beula,
voy a llevarla conmigo cuando me vaya.
Voy caminando todo jodido
por un lado de la carretera.
Nunca me sentí más solo ni más vivo.
Me he quitado las máscaras,
he tirado las tarjetas.
Voy a llevarlas conmigo cuando me vaya,
Al caer la noche los niños juegan.
En nuestro jardín hay extraños que cantan.
Deber haber algo más que carne y hueso:
del amor que recibes eres el único dueño.
En esta tierra hay un pueblo,
en este pueblo hay una casa,
en esta casa hay una mujer
y en esta mujer hay un corazón que amé...
Voy a llevarlo conmigo cuando me vaya.
lunes, 8 de diciembre de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario