Sé que algo malo está ocurriendo.
El pulso hace retornar al hijo pródigo.
Los corazones a oscuras, las noticias floridas
con diseños de cráneos sobre mis zapatos.
No puedo renunciar a todo.
Veo más y siento menos.
Digo no queriendo decir sí.
Esto fue lo que siempre quise decir:
ese es el mensaje que les dejo.
Y no puedo renunciar a todo.
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