Oh, dime, ¿dónde estás ahora,
pequeño sauce que sonreía en sus hojas?
Cuando estaba solo,
me prometiste la piedra de tu corazón.
Mi cabeza besó el suelo,
iba a medio camino hacia abajo,
pisando la arena...
Dame una mano, por favor.
Soy sólo una persona
cuyos brazaletes golpean sus manos,
colgando en lo alto...
¿No me extrañarás?
¿No me extrañarás ni un poco?
El camino de las aves de amapola
hace columpiar las ramas de café.
Blande su varita mágica
con una lengua emplumada.
Mi cabeza besó el suelo,
iba a medio camino hacia abajo,
pisando la arena...
Dame una mano, por favor.
Soy sólo una persona
con una cadena esquimal,
tatué mi cerebro...
¿No me extrañarás?
¿No me extrañarás ni un poco?
martes, 17 de febrero de 2015
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